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El Consorcio para la Gestión de Residuos Sólidos de Asturias (Cogersa) ha dado a conocer hoy, en un acto en Oviedo, las iniciativas para reducir el desperdicio de alimentos que representarán a nuestra región en los Premios Europeos de Prevención de Residuos, que se fallarán el 12 de junio en los Países Bajos. Los proyectos elegidos han sido desarrollados por el Grupo de Estimulación Cognitiva para Mayores del Ayuntamiento de Piloña, la asociación Ascivitas de Pravia, el IES Escultor Juan de Villanueva de Siero, la empresa Panduru Economía Circular y la vecina langreana Marlén Alonso.
El Consorcio para la Gestión de Residuos Sólidos de Asturias (Cogersa) ha dado a conocer hoy, en un acto en Oviedo, las iniciativas para reducir el desperdicio de alimentos que representarán a nuestra región en los Premios Europeos de Prevención de Residuos, que se fallarán el 12 de junio en los Países Bajos.
Los finalistas asturianos en este certamen -con el que culmina la Semana Europea de Prevención de Residuos (SEPR), que se celebró el pasado mes de noviembre, bajo el lema “El buen gusto no tiene desperdicio”- han recibido el reconocimiento en un acto presidido por la consejera de Transición Ecológica, Industria y Comercio, Belarmina Díaz. Al evento han acudido más de 200 representantes de las organizaciones participantes en la campaña, así como diversas autoridades locales y regionales.
Durante la mañana se ha hecho un repaso de la trayectoria de 15 años que ya acumula el consorcio promoviendo y difundiendo la SEPR en Asturias. La consejera ha subrayado la relevancia del papel de la ciudadanía: “Es fundamental consumir lo necesario y minimizar el desperdicio de alimentos en los domicilios familiares, promover la economía circular con prácticas sencillas como planificar la compra o cocinar con sobras; y si hay que tirar comida, la mínima posible, contribuir siempre al reciclaje de estos biorresiduos mediante su depósito en el contenedor marrón”.
Por su parte, la gerente de Cogersa, Paz Orviz, enfatizó la solidez del compromiso de Cogersa con esta campaña de educación ambiental de alcance europeo: “Somos el mecanismo, pero los verdaderos artífices de esta labor de concienciación son las personas que nos apoyan en los ayuntamientos, las empresas, los centros educativos y em las diversas entidades que cada año se acercan a esta iniciativa con sus propuestas y dinamizan el entorno social con nuestros mensajes de consumo responsable y reducción de residuos”.
En la selección de los cinco proyectos que representarán a Asturias se ha tenido en cuenta, no solo la participación alcanzada en términos cuantitativos, sino también la originalidad de las propuestas, la calidad y la ejemplaridad, así como la posibilidad de que se puedan replicar en otros entornos similares.
La descripción de estas acciones es la siguiente (se incluye enlace al vídeo resumen):
La iniciativa consistió en la realización de un recetario de reaprovechamiento de alimentos, por parte de un grupo de alumnas, todas ellas mayores de 65 años, que posteriormente publicaron sus consejos y trucos a través de distintos medios, entre otros, las redes sociales.
Esta empresa, liderada por dos emprendedoras asturianas, trabaja todo el año en transformar el pan excedente del comercio y la distribución en deliciosa repostería. Para la SEPR propusieron varias acciones, entre ellas, un curso de repostería circular para los usuarios de la Asociación Asperger Asturias. La formación se prolongó también durante el mes de diciembre con talleres formativos para la Fundación Secretariado Gitano en la que se elaboró un librito con recetas tradicionales y de aprovechamiento. Todo ello acompañado de mesas redondas y de una jornada de divulgación sobre gastronomía circular.
Los usuarios y las familias de la asociación Ascivitas de Pravia idearon actividades orientadas a movilizar y sensibilizar a la población del entorno respecto a la cantidad de residuos alimentarios que se desechan. Entre ellas, se elaboró un recetario colaborativo, con importante repercusión en las redes sociales. También se involucró a los establecimientos hosteleros del concejo con la campaña “Pincho de provecho” que anima a ofrecer a la clientela tapas y bocadillos elaborados a base de recetas de aprovechamiento.
Desde el módulo de Formación Profesional de Industria Alimentaria, el alumnado y sus docentes quisieron darle un uso innovador a un residuo muy habitual en la actividad sidrera de la zona, la magaya de la manzana. Gracias a un pequeño plan de I+D+i, llegaron a transformar 85 kilos del material en una suerte de harina sin gluten para los celíacos. Como prueba de su aplicación, fabricaron un muffin de plátano sin gluten. Y para darle visibilidad a su acción, desarrollaron un póster publicitario y realizaron diversas publicaciones en sus redes sociales. En un primer momento, consiguieron recuperar 85 kg de magaya. También se probó el depósito del residuo en la nueva compostadora del centro, con el fin de transformarlo en compost.
El centro puso en funcionamiento un mercado de frutas rescatadas del descarte de empresas mayoristas y destinó la recaudación obtenida por su venta en el recreo, a fines solidarios. De igual forma, a través de su emisora de radio escolar, Radio Prestosa, contribuyó con la prevención y el reciclaje de residuos, lanzando un mensaje de concienciación a través de las ondas.
Este proyecto busca demostrar cómo los ingredientes que a menudo consideramos sobrantes pueden transformarse en platos deliciosos y creativos, contribuyendo a la reducción del desperdicio alimentario. Para ello, Alonso utiliza la inteligencia artificial de ChatGPT para generar recetas personalizadas basadas en los ingredientes disponibles en casa, y posteriormente compartirlas en sus redes sociales, donde publica como Cucuruxina en la cocina, junto con consejos y vídeos de preparación.
Cogersa impulsa y coordina desde 2010 la Semana Europea de Prevención de Residuos. Desde entonces hasta la actualidad, se ha logrado la implicación de 1.620 entidades y organizaciones, que han desarrollado unas 2.172 acciones en todo el territorio regional.
Hasta en trece ocasiones los proyectos asturianos fueron reconocidos, bien como finalistas en diez ediciones, bien como ganadores dentro de su categoría a nivel de Europa, como fue el caso de los proyectos de la Asociación de Centros de Estudios de Idiomas de Asturias, en 2019; y de Corporación Alimentaria Peñasanta, S.L., en el mismo 2019 y luego en 2020.
En 2022, el proyecto “Mar de peces”, del Colegio Público Jovellanos de Gijón, ganó la votación del público. En 2012 la “Orquesta de papel” del Conservatorio Profesional de Música de Oviedo recibió la mención especial del jurado.
En la SEPR de 2024, celebrada entre el 16 y el 24 de noviembre pasados, se implicaron 476 entidades públicas, organizaciones y ciudadanos a título particular, que desarrollaron un total de 186 acciones en la región.
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