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La Unión Española Fotovoltaica (UNEF) celebra este año el Día Mundial de la Energía, que tiene lugar todos los 14 de febrero, con un nuevo récord con más de 3.233 MW instalados el año pasado, que junto con los que logró el autoconsumo (1.203 MW) hacen del 2021 el mejor año de la historia en potencia instalada fotovoltaica en España.
Especialmente el autoconsumo batió el año pasado un doble récord, con un incremento del 101,84% con respecto a 2020, cuando se pusieron en marcha 596 MW. En primer lugar, supuso el 30 por ciento de toda la potencia puesta en marcha y, en segundo lugar, las instalaciones residenciales experimentaron también un crecimiento espectacular. Mientras en el año anterior supusieron un 19% del total del autoconsumo conectado en ese ejercicio, el año pasado alcanzó el 30%.
Estos buenos resultados “revelan que cada vez hay una mayor concienciación entre la ciudadanía de que, además de ser una fuente de energía limpia, autóctona, que combate el cambio climático y que es la más responsable con el medioambiente, somos también una tecnología competitiva y barata”, señala José Donoso, Director General de UNEF.
De hecho, mientras que una instalación de autoconsumo puede conseguir ahorros del 30% o el 40% de la factura con una inversión que se puede recuperar en menos de seis años según los consumos, a más plantas solares en suelo, más se reduce el precio de la electricidad en el mercado diario. Este abaratamiento dota a nuestra industria y al país en general de competitividad y favorece la deslocalización de empresas extranjeras que quieran instalarse en España atraídos por un coste más bajo de la luz que les puede generar importantes ahorros.
Además, están empezando a ponerse en funcionamiento los primeros proyectos de autoconsumo colectivo, una tendencia que irá aumentando e impulsará todavía más al sector, al igual que el desarrollo de las comunidades energéticas. Ambas fórmulas pueden ser definitivas para el fortalecimiento de la industria nacional por el ahorro en costes eléctricos que les puede suponer, así como para las cooperativas agrícolas, por ejemplo.
El apoyo del Gobierno con nuevas regulaciones, la eliminación progresiva de barreras administrativas y los incentivos locales también han hecho que cada vez más particulares se conviertan en autoconsumidores. Esta es una de las prioridades de UNEF, la simplificación administrativa frente al autoconsumo. En esta línea, ha logrado que este año sean ya 14 las Comunidades Autónomas que han eliminado la licencia de obra para las instalaciones sobre tejado y esperamos que las que faltan se sumen muy pronto.
La fotovoltaica es, además, una apuesta por la biodiversidad. Dos estudios presentados en el pasado Foro Solar, uno realizado por la empresa de estudios medioambientales EMAT y otro elaborado por la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM), demuestran el impacto positivo que tienen las plantas fotovoltaicas sobre el entorno de los territorios donde se instalan.
UNEF trabaja para que los criterios de integración socioeconómica y ambiental de las plantas fotovoltaicas en suelo sean cada vez más exigentes y aplicados por todas las empresas del sector. Además, apuesta por el diálogo y las alianzas con las entidades municipales y los grupos de interés locales para crear valor compartido allí donde se enclave una instalación.
Por eso, el año pasado lanzó el Certificado de Excelencia en Sostenibilidad y respeto a la Biodiversidad de las plantas fotovoltaicas y ha llegado de momento a acuerdos en la ciudad de Cartagena o con la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha.
Hay que añadir nuestra aportación a la economía española. La contribución directa de la fotovoltaica al PIB español fue de 3.717 millones de euros en 2020.En cuanto al empleo, hubo 58.892 trabajadores nacionales ligados directa, indirecta e inducidamente al sector. La fotovoltaica es un exportador neto. Los datos del año 2020 superan a los del 2019 alcanzando los 2.565 millones de euros, lo que demuestra su competitividad a nivel internacional.
De cara al futuro, además de seguir trabajando en estas líneas, tenemos el desafío de consolidar el sector industrial fotovoltaico español y crecer en todas las áreas de la cadena de valor.