Empresas Premium
La cuarta edición del FORO DE LAS CIUDADES DE MADRID 2021, organizada por IFEMA MADRID y celebrada entre los pasados días 8 y 10 de junio en formato online, fue seguida por más de 1.000 personas, que asistieron al análisis en torno al diseño de la nueva ciudad. En el evento, participó un total de 49 ciudades españolas e iberoamericanas y más de 90 ponentes en representación de administraciones públicas, empresas y organizaciones nacionales e internacionales.
En la inauguración del FORO DE LAS CIUDADES DE MADRID, participaron Almudena Maíllo, Secretaria General de la Unión de Ciudades Capitales Iberoamericanas, UCCI, y titular del Área Delegada de Turismo del Área de Gobierno de Cultura, Turismo y Deporte del Ayuntamiento de Madrid; Abel Caballero, Presidente de la Federación Española de Municipios y Provincias, FEMP, y Alcalde de Vigo; Pedro Saura, Secretario de Estado de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana del MITMA, y Eduardo López-Puertas, Director General de IFEMA MADRID.
Agendas para la nueva ciudad
Tras este acto inaugural, se celebraron las 12 sesiones temáticas. Las tres primeras giraron en torno a las grandes estrategias y visiones de largo alcance de las ciudades, pues abordaron las Agendas Urbanas (tanto la de Naciones Unidas como la española y las que ya existen en comunidades autónomas y algunas ciudades), la Agenda 2030 y sus 17 ODS, y el trabajo de las redes urbanas a nivel internacional.
Las ciudades y territorios participantes en estas tres primeras sesiones fueron La Coruña, el Gobierno autonómico Vasco, Málaga, Palma, Barcelona, Madrid, San José de Costa Rica, Vitoria-Gasteiz y Medellín (Colombia), además de entidades, organizaciones y redes como MITMA, ONU-Habitat, CGLU, ICLEI Europa, UCI, CIDEU, CIVINET, C40 y ECODES.
La visión global en estas sesiones apuntó no solo hacia una pronta recuperación de las agendas de desarrollo urbano tras la pandemia de Covid, sino también a aprovechar la ocasión para replantearse el modelo de ciudad y las relaciones entre las urbes que intercambian experiencias y buenas prácticas a través de las redes internaciones, y que trabajaron intensamente durante los meses de confinamiento. Esta pandemia ha visibilizado las carencias crónicas de las ciudades y la baja calidad de sus capacidades resilientes para hacerlas frente. Por ello, el papel de las redes urbanas se hace más necesario que nunca para articular respuestas comunes.
Las agendas urbanas, así como la Agenda 2030, que proponen una nueva ciudad apoyada en la planificación y la cohesión social, están siendo el punto de apoyo sobre el que muchas ciudades están comenzando una transformación profunda que afecta desde las políticas de vivienda hasta la movilidad, pasando por nuevas competencias municipales y mayores capacidades de financiación, modelos de consumo diferentes, un papel más activo de la ciudadanía o la lucha contra el cambio climático.
En este sentido, cabe destacar la presentación realizada por Eduardo Moreno, experto en urbanismo e innovación de ONU-Habitat, quien presentó el informe recientemente publicado “Ciudades y pandemia”. En este documento se recalca la idea de que si las ciudades tienen capacidades suficientes pueden ser la primera línea de defensa ante crisis como la pandemia de Covid, generando respuestas rápidas sobre el territorio y habilitando coberturas sanitarias y sociales a los afectados.
Ambición climática
Precisamente, el calentamiento global y su impacto en los entornos urbanos fue el tema de la cuarta sesión del FORO, con la participación de Valladolid, Madrid, Irún, Santander, Vitoria-Gasteiz, Lima (Perú) y Sevilla, así como la organización Forética. Cabe señalar que todas las ciudades participantes tienen ya planes específicos para la reducción de emisiones de C02 y de su huella ambiental, actuando sobre el parque edificatorio, los modelos de movilidad y los sumideros de carbono, como son los espacios verdes y azules tanto en el interior de los cascos urbanos como en los ecosistemas naturales donde se asienta la población.
Planificar y regenerar
Pensar la ciudad antes de intervenir, porque la ciudad que se levanta tendrá una vida de decenas de años, y recuperar la ciudad existente para “crecer hacia adentro” y ganar compacidad y densidad. Estas y otras cuestiones de fondo surgieron en la sesión sobre planificación urbana del FORO con la Generalidad de Valencia, las ciudades de Madrid y Bilbao, el Consejo Superior de Colegios de Arquitectos de España, CSCAE, y la Asociación Sostenibilidad y Arquitectura, ASA. Algunas de las ideas escuchadas durante la sesión fueron la importancia de las intervenciones a nivel “micro” acompañando a los grandes proyectos de regeneración; la inclusión en el proyecto y previo a su ejecución del verde urbano; la colaboración público-privada; la necesidad de “pensar más allá de los cuatro años que dura una legislatura”; analizar bien las demandas reales de vivienda y los flujos de población y la urgencia de una transformación integral para cambiar de raíz del modelo de ciudad colocando a la ciudadanía en el centro de la mirada.
Una de las sesiones más intensas fue la dedicada a las estrategias de regeneración urbana, especialmente en estos momentos de mayor vulnerabilidad tras la pandemia de Covid. La cantidad de propuestas que ya están en marcha demostraron que las ciudades están reaccionando en el cambio de paradigma de los modelos urbanos y en la responsabilidad de los gobiernos locales frente al reequilibrio territorial y la lucha contra las desigualdades. Este fue el caso del Plan de Barris de Barcelona, las estrategias urbanas de la ciudad de Castellón o los proyectos de Madrid y Pamplona, todos ellos con un enfoque muy marcado hacia la regeneración de la ciudad existente y el freno al crecimiento expansivo de la “ciudad nueva”. Las visiones aportadas o WRI México y la red URBACT reiteraron esta línea de trabajo urbano.
Más ciudad verde
Como ya es habitual en las ediciones del Foro de las Ciudades de Madrid Ifema, la naturaleza urbana tuvo dos sesiones intensas y enriquecedoras en ideas y propuestas, con un total de 11 ponentes con ciudades como como Salamanca, Lugo, Rivas Vaciamadrid, Alcobendas, Logroño, Zaragoza, Madrid Burgos y Valdivia (Chile), además de la Asociación Española de Paisajistas, AEP; la Asociación Española de Parques y Jardines Públicos, AEPJP; Iniciativa Latinoamericana del Paisaje, LALI, y la Asociación de Empresas de Gestión de Infraestructura Verde, ASEJA.
Escuchando las ponencias, parece claro que la renaturalización urbana (en todas sus extensiones y conceptos) ya está en la primera línea de actuación de las agendas municipales con la aplicación de una nueva gestión del verde urbano, aunque no exenta de problemas en el terreno de las inversiones para el mantenimiento que, sin duda, es un elemento a tener muy en cuenta cuando se diseñan espacios verdes nuevos. Todas las ciudades participantes tienen ya proyectos de mejora de la naturaleza en sus territorios, incluyendo visiones sobre la relación urbano-rural, la inclusión del agua como elemento crítico, o la necesaria adaptación a los impactos del cambio climático que están haciendo cambiar las condiciones de los ecosistemas naturales urbanos, por ejemplo, aumentando las islas de calor.
Ciudades circulares
El estado actual de la economía circular en las ciudades fue tratado en una sesión temática con ponentes de Madrid, Getafe y la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona, además de representantes de la Asociación Nacional de Empresas Públicas de Medio Ambiente (ANEPMA), Ecoembes, la Universidad Politécnica de Madrid (UPM) y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), que señaló que para lograr procesos de economía es necesario ir más allá de los aspectos exclusivamente técnicos, lo que requiere establecer el marco adecuado de gobernanza y entorno propicio en el que las ciudades y regiones actúen simultáneamente como promotoras y facilitadoras.
Mientras que hemos podido comprobar que se están dando importantes pasos, como en la recogida selectiva, el reciclaje o la conciencia ambiental de la ciudadanía, también se ha constatado que la velocidad a la que se implementan las acciones de economía circular no es la deseada a la vista de las exigencias en materia de gestión de residuos por parte de la UE y de la futura nueva Ley de Residuos española, detectándose ventanas de crecimiento, por ejemplo en el impulso a la compra pública verde e innovadora y en el avance en la reducción, reutilización y recuperación como pasos previos al reciclaje.