FACSA desplegará su potencial tecnológico en el servicio de saneamiento de agua residual en alta de la Costa Brava

De esta manera, la compañía -que ya es responsable del servicio de abastecimiento de agua en la zona- tratará las aguas residuales de 474.800 habitantes a través de la gestión de un total de 13 depuradoras y 86 estaciones de bombeo, que impulsan un caudal de diseño de 106.340 m³/día a través de 85 km, entre colectores de impulsión y emisarios terrestres y submarinos. Todo ello gracias a un equipo de 58 trabajadores y trabajadoras entre personal técnico y operador que han sido subrogados al contrato.

Desde el punto de vista tecnológico, el servicio se beneficiará del potencial de FACSA que, bajo su nueva marca Waternology, aportará diferentes soluciones digitales aplicadas a la gestión inteligente del ciclo integral del agua. Estas soluciones, basadas en tecnologías como el Big Data, la Inteligencia Artificial y los Gemelos Digitales, favorecerán la gestión de los activos, la monitorización y el telecontrol de las operaciones, así como la gestión, análisis y simulación inteligente de datos.

Al mismo tiempo, la adjudicación trae consigo una fuerte apuesta de formación y transferencia de conocimiento, a través de las cuales se pretenden introducir nuevas formas de trabajar, procedimientos y experiencia al Consorci d’Aigües para mejorar las instalaciones, la organización y, en definitiva, el servicio.

De esta forma, se transmitirá la metodología de explotación desarrollada por FACSA, basada, entre otros, en el uso de herramientas de simulación de los procesos, mediante el uso combinado de herramientas de simulación de las reacciones cinéticas y bioquímicas que tienen lugar en el seno de los reactores biológicos (Biowin) y la dinámica computacional de fluidos (CFDs). Además, también está previsto aplicar CFDs para llevar a cabo el análisis y estudio de las problemáticas por generación de olores que pueden llegar a producirse en las instalaciones de depuración. Estos trabajos se realizarán desde Hydrens, la línea de negocio de la compañía de Grupo Gimeno especializada en ofrecer soluciones tecnológicas innovadoras basadas en la mejora del comportamiento de los fluidos para aumentar el rendimiento de los procesos.

Desde el punto de vista medioambiental, el servicio también da un paso importante, ya que se realizará un inventario de gases de efecto invernadero de la actividad de depuración de aguas residuales de todos los sistemas de saneamiento, utilizando como herramienta de cálculo la norma UNE-EN-ISO 14064-1.

Además, se optimizará el término de energía mediante la integración de placas solares fotovoltaicas para el autoconsumo de las instalaciones y plantas solares térmicas y se promoverá la ejecución de mejoras enfocadas a la optimización de la eficiencia energética en base a la ISO 50:001, certificación con la que ya cuentan las instalaciones.

Otro aspecto a destacar es la apuesta de la compañía por la automatización y sensorización de los procesos. Durante el contrato se implementarán diferentes sistemas de control desarrollados internamente como son el control de la recirculación de los fangos biológicos y de la deshidratación mecánica, así como el sistema de control avanzado de la aireación (LOBO2), sistema diseñado y desarrollado por FACSA basado en lógica borrosa y que incluye una estrategia de funcionamiento tarifaria.