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ACCIONA gestiona el servicio de limpieza viaria, recogida de residuos y mantenimiento de playas en Premià de Mar (Barcelona).
El nuevo sistema de recogida puerta a puerta en Premià de Mar ha sido implementado recientemente para mejorar la gestión de los residuos en el municipio. Este sistema se centra en la recogida selectiva en los comercios, asegurando que los establecimientos separen adecuadamente sus desechos.
¿Cuál fue la motivación principal para implementar el sistema de recogida comercial puerta a puerta en Premià de Mar?
El cambio del sistema de recogida en los comercios tiene 3 objetivos: el primero es aumentar la recogida separada de aquellos materiales que se puedan reutilizar y reducir los residuos que van a la incineradora o al vertedero. En segundo lugar, asegurar que los residuos se depositan en el contenedor correcto y poder establecer campañas educativas en aquellos puntos donde se detecte un menor nivel de separación. Y, finalmente, establecer un sistema de bonificaciones para premiar el buen uso del sistema.
Antes de la implementación del sistema, Premià de Mar estaba a la cola del reciclaje de residuos del Maresme con una cifra inferior al 40%, mientras que la Unión Europea establece que en 2025 hemos de llegar al 55% y al 60% en el 2030. Si no lo hacemos así, el Ayuntamiento recibirá sanciones importantes que tendrá que repercutir en las tasas de los ciudadanos.
¿Qué desafíos encontraron durante la implementación del sistema y cómo los superaron?
Los cambios cuestan, y éramos conscientes de ello. Por este motivo, desde el primer momento pusimos en marcha una importante campaña informativa, tanto para los comercios como para la ciudadanía en general, y la fuimos adaptando a las necesidades que detectábamos. En el momento de comenzar a desplegar el nuevo sistema, lo hicimos de manera progresiva y con personal de información y apoyo presencial en las mismas baterías de contenedores.
¿Cómo ha sido la respuesta de los residentes y comerciantes locales hasta ahora?
En general la respuesta ha sido muy buena. Siempre hay algunas personas contrarias al cambio, que en algunos casos han llegado a fomentar el incivismo o que incluso han cometido actos vandálicos contra los contenedores, pero afortunadamente son una minoría. La ciudadanía, en general, lo ha aceptado bien y se han ido acostumbrando al nuevo sistema.
¿Qué medidas se tomaron y como se desarrolló la campaña informativa para asegurar que los ciudadanos comprendiesen y participasen activamente en el nuevo sistema?
A los comercios se les fue a visitar uno por uno para darles toda la información y aclararles la dudas que pudieran tener. De cara a la ciudadanía, se envió información a todos los hogares, incluyendo una revista monográfica que contenía, entre muchas otras informaciones, unas FAQ para resolver las dudas más frecuentes. También se creó un portal web muy completo, se hicieron vídeos divulgativos y se hizo mucha difusión a través de las redes sociales y también en la calle, a pie de los contenedores, para poder llegar a todo el mundo.
¿Cómo se gestionan las diferentes fracciones de residuos, como los textiles y el aceite usado?
El contenedor gris, el de la fracción de restos que no se pueden reciclar, va directamente al vertedero o a la incineradora, por lo que es la gestión más cara y contaminante. Si separamos correctamente los residuos en los otros contenedores (vidrio, orgánico y envases), este será el que menos hay que utilizar, y es por este motivo que es importante no tirar dentro ni ropa, ni calzado, ni muebles, ni restos vegetales leñosos ni, naturalmente, envases, papel y cartón, restos orgánicos o vidrio, que son materiales que ya cuentan con contendores o servicios de recogida específicos. También hemos instalado contenedores de aceite y para la recogida de pilas en diversos lugares buscando fomentar al máximo el reciclaje y, por supuesto, evitar la contaminación.
¿Qué beneficios ambientales y económicos esperan lograr con este nuevo sistema?
El objetivo fundamental de esta iniciativa es reducir el impacto negativo de los residuos en el medio ambiente y promover el reciclaje. A través de la implementación de los nuevos contenedores cerrados, se busca incrementar el porcentaje de material reciclado del municipio hasta llegar al 55 %, tal como exige la normativa europea para el 2025. Actualmente, en nuestra ciudad estamos por debajo del 40 %. Esto no solo nos permitirá cumplir con las regulaciones ambientales, sino que también contribuirá a preservar nuestros recursos naturales, reducir la contaminación y minimizar los gastos que se derivan de la gestión de los residuos no reciclados, que actualmente están cerca de los 800.000 € anuales.
Además, la implementación de este nuevo sistema pretende mejorar la calidad de vida de la ciudadanía de Premià de Mar. Mediante la separación selectiva de los residuos y su gestión eficiente, se promueven prácticas más limpias y saludables para la comunidad. Esto incluye la reducción de malos olores, la prevención de plagas y la mejora de la higiene urbana para contribuir a crear un entorno más agradable y saludable para todos los habitantes de la ciudad.
El sistema más eficaz de recogida selectiva, es sin duda el puerta a puerta, y los modelos de otras poblaciones así lo demuestran. Lo que pasa es que Premià de Mar tiene un núcleo de población muy denso y, por ahora, no se puede implementar este sistema en los domicilios.
Para abrir los nuevos contenedores de la basura, es necesario usar una tarjeta personal o la aplicación para el teléfono móvil. Este sistema de identificación de obertura permite bonificar la tasa de la basura de las personas que hagan un buen uso del sistema, que denominamos la tasa justa, mediante la cual, las personas que hacen un buen uso del sistema pagan menos y los que lo hacen incorrectamente pagan más.
Ahora mismo estamos centrados en llegar al 55% de material reciclado antes del 2025. A partir de aquí, continuaremos analizando el funcionamiento del sistema e iremos tomando las decisiones oportunas, siempre en beneficio de nuestros vecinos, del medio ambiente y de nuestra ciudad.
El consejo que doy a los municipios que se han dirigido a nosotros, es que hay que tener paciencia y actuar siempre en positivo. Se trata de un cambio que tenemos que hacer por el bien de todos. Hay que explicar muy bien a la ciudadanía la importancia y la necesidad de este cambio y hacer una buena campaña informativa. En los primeros días, también es muy importante el apoyo de colaboradores a pie de contenedor para resolver dudas y explicar el funcionamiento del sistema y de los contenedores.
Hay varios municipios vecinos que implementaran este sistema próximamente, y ya se han puesto en contacto con nosotros para que les expliquemos nuestras experiencias y resolver las dudas existentes y los elementos de mejora para minimizar el impacto inicial de la puesta en marcha del nuevo sistema.
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