Empresas Premium
María Gálvez del Castillo Luna. CEO de Smart Blue Lab y Embajadora del Pacto Climático Europeo.
En la Unión Europea, se está llevando a cabo una profunda transformación regulatoria y estratégica destinada a la transición ecológica y a la descarbonización de nuestra economía. Respaldada con fondos públicos, esta revolución tendrá un impacto significativo en el ámbito económico, social y medioambiental de empresas, entidades gubernamentales y organizaciones, tanto del sector público como privado. En este momento crucial, lleno de retos y oportunidades, el mar y la economía azul europea tienen un papel fundamental.
La singularidad y diversidad de los ecosistemas que conforman el medio marino y costero confieren a este espacio un elevado valor ecológico, cultural, social y económico. Estos ecosistemas, altamente productivos desde el punto de vista económico, albergan una multitud de servicios, usos y actividades económicas. La economía azul, que abarca todas las actividades económicas relacionadas con los océanos, las costas y los mares, desempeña un papel crucial en la prosperidad económica y el bienestar social del territorio. No obstante, las zonas costeras y los mares también experimentan impactos significativos, especialmente relacionados con el cambio climático, la pérdida de biodiversidad, la contaminación y una gestión, en ocasiones, inadecuada, que puede ocasionar problemas sociales, económicos y medioambientales en las comunidades costeras.
En este sentido, la Comisión Europea propuso en mayo de 2021 un nuevo enfoque de la economía azul, reconociendo su papel vital para el bienestar humano. La economía azul sostenible permite aprovechar todo el potencial de los océanos y las costas, respetando su capacidad a largo plazo para regenerarse. Esto implica la necesidad de gestionar las actividades humanas de manera sostenible, abordando retos como la neutralidad climática, la descarbonización de industrias, la contaminación cero, el fomento de energías renovables, la economía circular, la adaptación al cambio climático, preservar la biodiversidad e invertir en la naturaleza, garantizar una producción de alimentos sostenible y mejorar la gestión del mar.
Transición Ecológica y Oportunidades Empresariales
Las empresas se enfrentan al desafío de innovar y mejorar su rentabilidad y sostenibilidad mientras consideran el impacto de sus acciones en la sociedad y en el medio ambiente. La transición ecológica, una tendencia respaldada por las políticas públicas y demandada por la sociedad, implica cambios en procesos productivos, reconversión de instalaciones y adaptación a las nuevas realidades climáticas. No obstante, esta transición también está repleta de oportunidades vinculadas a la modernización y al aumento de mejoras medioambientales y sociales, las cuales tendrán un impacto positivo tanto en la productividad como en la rentabilidad empresarial.
Desde Smart Blue Lab asesoramos a empresas del sector y vemos un cambio muy favorable en los últimos años y creemos que irá a más en el futuro. El sector ha sufrido problemas de márgenes empresariales por la crisis energética y necesitará financiación para acometer las inversiones necesarias para la transición energética y ecológica. Por esta razón, es crucial que la regulación sea realista y flexible, teniendo en cuenta el desarrollo tecnológico, así como las condiciones financieras y del mercado.