"FER es la principal asociación del sector del reciclaje de residuos en España"

Alicia García-Franco es licenciada en Derecho por la Universidad Complutense de Madrid y cuenta con un máster en Gestión Ambiental por la Universidad de Comillas, Diplomada en Derecho Ambiental por el Colegio de Abogados y máster en Asesoría Jurídica de Empresas de la escuela de negocios Instituto de Empresa.
Fue nombrada Directora General de FER en junio de 2009, pero Alicia García-Franco ha sido Secretaria General de FER desde 1995. Hasta su nombramiento como Directora General ha desarrollado su trayectoria profesional como socia directora del departamento Mercantil y Directora del Área de Recursos Humanos y Marketing de un prestigioso despacho de abogados, cargo que compaginó con la Secretaría General de la Federación y con diversas labores de asesoramiento jurídico.
En septiembre de 2014 también fue elegida vicepresidenta de EuRIC (European Recycling Industries Confederation), Confederación llamada a representar y defender los intereses de toda la industria europea del reciclaje.

¿Nos puede explicar brevemente qué es FER y cuál es su aportación al sector del reciclaje y medio ambiente?
La Federación Española de la Recuperación y el Reciclaje (FER) es la principal asociación del sector del reciclaje de residuos en España. Desde hace más de 30 años defiende los intereses de las empresas gestoras de residuos en los diferentes ámbitos: económicos, sociales y ambientales.
En su labor de representación de los recicladores españoles, la Federación es miembro corporativo de UNE (Asociación Española de Normalización) y forma parte de diversas asociaciones nacionales, europeas e internacionales relacionadas con el reciclado, como SIGRAUTO (Asociación Española para el Tratamiento Medioambiental de los Vehículos fuera de Uso), la Federación Española del Reciclado y el Medio Ambiente (FERMA), o la Confederación Española de Organizaciones Empresariales del Metal (CONFEMETAL). A nivel internacional es miembro del Bureau of International Recycling (BIR) y forma parte de su Consejo Internacional de Medio Ambiente. A nivel europeo es miembro de European Recycling Industries Confederation (EuRIC) y de sus divisiones de metales férricos y no férricos, European Ferrous Recovery and Recycling Federation (EFR) y European Metal Trade and Recycling Federation (EUROMETREC). Ion Olaeta, Presidente de FER, ha sido elegido Vicepresidente de EFR, y en mi caso, Directora General de FER, he sido nombrada Vicepresidenta de EuRIC. Asimismo, FER mantiene contactos con CEOE y asociaciones de recuperadores de otros materiales como papel y cartón, madera, plásticos y vidrio, con los que se ha creado el Foro de la Recuperación.
La principal aportación de FER al reciclaje y al medio ambiente es la defensa de la labor fundamental que desarrolla la industria de la gestión de residuos para el desarrollo sostenible y la dignificación de un sector que es primordial para la economía circular y para que nuestro país alcance los objetivos de reciclaje a los que se ha comprometido con la Unión Europea. También destaca por su apuesta por la formación continua en el sector de la recuperación al considerarla como un elemento crucial en la mejora y la capacitación del personal que forma parte de él.

¿Cuáles son los principales objetivos de FER?
La representación y defensa de los gestores de residuos. Además, como patronal del sector de la recuperación y el reciclaje, FER se ha convertido en una herramienta esencial de las empresas en su interlocución con las administraciones públicas y privadas.

¿Con cuántas empresas asociadas cuenta FER y cuál es el trabajo que desde la Federación se realiza con ellas? ¿A qué sectores concretos representa FER?
En la actualidad cuenta con más de 230 socios, y gracias a las asociaciones regionales, autonómicas o relacionadas con el metal y otros tipos de residuos que han querido formar parte de la Federación, representa a más de 435 empresas gestoras de residuos, entre los que figuran los metales férricos y no férricos, los residuos de aparatos eléctricos y electrónicos, los neumáticos fuera de uso, los vehículos fuera de uso, madera, envases o baterías de automoción, entre otros.

Imaginamos que cada uno ellos presenta una problemática diferente. ¿Cómo se articula el trabajo para satisfacer a cada uno de ellos?
En primer lugar, mediante un know how y un contacto permanente con nuestros asociados para dar respuesta a la problemática particular y general que se les plantea en su operativa cotidiana.
En segundo lugar, mediante el estudio y análisis continuo de las decisiones y propuestas de carácter económico y legislativo que les afecta tanto en el ámbito nacional como internacional por parte del personal especializado que trabaja en la Federación.
Por último, a través de distintos grupos de trabajo en cada una de las áreas y materiales que gestionan nuestros asociados y la presencia en las principales instituciones empresariales y en aquellos foros y reuniones en las que desarrollamos nuestra labor de representación del sector ante entidades, organismos y gobiernos.

¿Qué representación tienen en el mercado los diferentes sectores que agrupa FER?
A modo de ejemplo, representan el 90% del volumen del sector de la recuperación de metales férricos y no férricos, así como el 60% de los recicladores de neumáticos fuera de uso. Dentro de FER se encuentran asimismo el 80% de los tratadores RAEE y el 100% de la industria fragmentadora de metales de España.

¿Y en el caso de los Grupos de Trabajo? ¿Cómo articulan el trabajo de los mismos?
En FER existen diferentes grupos que trabajan en las problemáticas específicas y particulares de diferentes flujos de residuos o bien en temáticas concretas para dar soluciones a ese conjunto de gestores que lo conforman.
Entre estos grupos de trabajo están el de residuos de aparatos eléctricos y electrónicos, exportación de residuos, fragmentadores, neumáticos fuera de uso, reciclaje de buques o residuos de palets y de madera.

¿Cómo promueven desde FER el desarrollo de la economía circular?
Dando visibilidad y dignificando la labor crucial que desarrollan los gestores de residuos. Aunque el término de “economía circular” es reciente, es un tipo de economía que los recuperadores llevan realizando incluso antes de que se fundara FER porque su principal actividad ha sido siempre la de convertir residuos en recursos, que equivale a cerrar el ciclo de vida de cada producto, algo en lo que se basa y se sustenta la economía circular que impulsa la Unión Europea. Por tanto, promover el desarrollo de la economía circular es una labor que FER lleva haciendo desde que fue creada, basada en la representación y defensa de las empresas que son los actores principales para que pueda llevarse a cabo.

¿Qué esperan del próximo Congreso Nacional de la recuperación y el reciclaje?
Como en cada edición que hemos celebrado, esperamos suscitar el mayor interés y participación de nuestros asociados y de todas las personas, empresas, medios de comunicación, organismos e instituciones relacionadas con o interesadas en la industria del reciclaje. Somos conscientes de que cada congreso tiene mayor repercusión que la edición anterior y, por tanto, para nosotros es una gran responsabilidad saber canalizar los temas que generan mayor interés por parte del sector a través de las diferentes mesas redondas y jornadas técnicas, y que éstas cuenten con los mayores expertos en las cuestiones que allí se van a plantear. Además, al celebrar el Congreso conjuntamente con el Salón de la Recuperación y el Reciclado (SRR), del que FER es uno de los organizadores, tenemos la oportunidad de concitar en un mismo espacio y tiempo a las principales empresas y organismos del reciclaje tanto de España como de otros países.

¿Cómo animaría al profesional del sector a participar en el mismo?
El Congreso supone una oportunidad única en todo el año para concitar en un mismo espacio a los principales actores del reciclaje en España. Por lo tanto, es un evento donde, además de ampliar conocimientos e intercambiar experiencias, la oportunidad para el networking y la creación de nuevos lazos comerciales son muy importantes. Sin olvidar que el Congreso también es un momento único para afianzar las relaciones con nuestros asociados y compartir vivencias de todo el año, además de ofrecerles una parte más lúdica en la que estrechar las relaciones personales.

¿Cuáles son los aspectos normativos que más influyen en su actividad? ¿Cómo podrían mejorarse desde la Administración algunos de ellos?
Sin duda, el aspecto normativo que más influye negativamente en el desarrollo cotidiano de la gestión de residuos es el derivado de las cargas burocráticas impuestas por las distintas administraciones. El lema instalado en la memoria colectiva del sector es el de que para mover un kilo de chatarra hay que hacer lo propio con un kilo de papeles. Esto tiene un doble coste: temporal y económico para cada una de las empresas del sector, hasta el extremo de poner en serio riesgo su viabilidad. Para solucionarlo, es fundamental establecer un proceso gradual de simplificación administrativa y acabar con las duplicidades existentes en los diversos registros de datos de las distintas administraciones. Esto incluye optimizar las plataformas electrónicas actuales para agilizar los trámites en el volcado de datos requeridos.
Por otro lado, nuestros asociados cumplen con todas las obligaciones legales y fiscales y, por tanto, otra prioridad debe ser acabar con las campas ilegales que operan al margen de la normativa y que suponen un caso grave y flagrante de competencia desleal. Así se lo hemos hecho llegar a las distintas administraciones a través de denuncias y de requerimientos y esperamos que este sea por fin el año en el que se actúe con decisión y con todo el peso de la ley ante estos operadores ilegales que ponen en serio riesgo el medio ambiente, como ha quedado manifiestamente demostrado con algunos graves incendios acaecidos en este tipo de instalaciones ilegales.

¿Qué sinergias mantiene con otras asociaciones del sector del reciclaje?
FER siempre ha apostado por la agrupación de las distintas voces existentes en este sector porque creemos firmemente que si actuamos unidos, tendremos más fuerza ante los distintos gobiernos e instituciones para que se escuchen nuestras demandas. Por tanto, mantenemos una línea de comunicación fluida con otras asociaciones y en muchos casos colaboramos activamente para que sean atendidas las necesidades específicas del gestor de residuos en aras de poder mejorar no solo las condiciones en las que desempeña su trabajo, sino también para dar nuestro punto de vista sobre cómo poder aumentar las tasas de recogida y reciclaje para cumplir con los objetivos establecidos por la Unión Europea para sus Estados miembro.

¿Cuáles son en su opinión los principales retos de FER en el medio plazo?
A medio plazo, FER seguirá defendiendo los intereses del gestor de residuos y lo representará ante los nuevos desafíos económicos y normativos a los que España deberá hacer frente. En materia de reciclaje tenemos unos compromisos adquiridos con la Unión Europea a través de unos objetivos ya para 2020 y otros aún más ambiciosos para 2030 que marca el Paquete de Economía Circular. En este año se aprobarán y publicarán las modificaciones de las Directivas de residuos, envases y depósito en vertedero y a continuación comenzarán los trabajos para transponer esas normas al ordenamiento jurídico español.
También queremos desarrollar junto al Ministerio de Medio Ambiente la aplicación de los criterios fin de la condición de residuo para el caucho reciclado procedente del neumático al final de su vida útil (NFVU) a nivel nacional.
En ese medio plazo nos gustaría poder contar con una formación reglada para este sector, dadas las especificidades de su desempeño. Así se lo hemos hecho llegar a los responsables en materia educativa y esperamos una respuesta positiva. Eso, sin olvidarnos de incentivar entre nuestros asociados su apuesta por la I+D+i en sus plantas de tratamiento y la formación continua de sus equipos humanos.